6 secretos para una correcta limpieza facial antes de la boda
Si se acerca la boda y no has iniciado tu rutina de limpieza facial, este el momento para empezar. ¿Sabes cómo hacerlo? Aquí descubrirás los secretos para que tu piel luzca más limpia y radiante uno de los días más felices de tu vida.
La apariencia de tu piel es parte esencial de tu look nupcial. No habrá mejor complemento para tu hermoso vestido de novia y tu elegante peinado recogido, que una piel radiante. Aunque haya tratamientos estéticos que puedas realizar días antes de tu boda, la limpieza regular de la piel es crítica si quieres tener una piel que luzca y se sienta saludable. Una buena rutina de limpieza elimina las impurezas, las bacterias y los aceites no deseados, ayuda a mantener hidratada la piel y la prepara para que los tratamientos y productos de belleza surtan mejores resultados. Aquí algunos consejos para que tu piel esté tan radiante como tu bouquet de novia.
1. Un producto de limpieza acorde a tu tipo de piel
Para limpiar tu piel no es suficiente el jabón que usas normalmente para tu cuerpo o manos. El producto de limpieza para la piel de tu cara debe corresponder a tu tipo de piel. Como modelos de vestidos de novia, hay un producto para cada condición facial. ¿Cuál es tu tipo de piel? ¿Normal, seca, grasa, mixta o sensible? Consulta esto con un dermatólogo. Por ejemplo, para las personas con piel grasa o mixta es mejor utilizar limpiadores en espuma o gel, mientras que a las personas con piel seca les favorecen productos en crema.
2. Mantén una rutina de lavado diaria y seca bien tu piel
Lava tu rostro dos veces al día, con agua tibia y el limpiador adecuado para tu tipo de piel, una vez en la mañana y otra antes de dormir. Ten en cuenta que el agua muy fría o muy caliente puede hacerle daño. Antes de lavar tu cara, no olvides lavarte muy bien las manos con agua y con jabón. No querrás trasladar bacterias y suciedad a tu piel.
Para lavarla masajéala suavemente con las yemas de tus dedos, lentamente y en forma circular, durante uno o dos minutos. Enjuágala muy bien. Asegúrate que no queden residuos de jabón. Es muy importante que seques tu piel con toques suaves, sin frotarla. Usa una toalla de tela o de papel que esté limpia. Si para secarte usas la toalla de las manos o del cuerpo, llevarás a tu piel las bacterias que eliminaste con el lavado.
3. Usa un tónico o una crema hidratante
Como lo harías con los ramos de flores naturales, hidrata y nutre la piel luego del lavado. Un buen hidratante, diseñado particularmente para cada tipo de piel, captura el agua que queda en la piel evitando que se evapore. Y aunque no son indispensables, los tónicos faciales te vendrían bien, especialmente si tu tipo de piel es mixta o grasa. Estos productos mantienen la piel limpia, remueven el exceso de grasa y las impurezas que quedan luego del lavado y tienen ingredientes que nutren tu piel.
4. De acuerdo con tu tipo de piel, realiza eventualmente alguna exfoliación
Una exfoliación suave incrementa la circulación de tu piel dándole un aspecto más saludable y luminoso. Si tienes alguna afección en tu piel, debes consultar con un dermatólogo el tipo de exfoliante y las pautas para usarlo. Elige un tipo de exfoliación que no sea agresivo para tu piel: los hay suaves, compuestos por ingredientes naturales; de nivel medio, con cepillos manuales y ultrasónicos; y los hay fuertes, con ácidos, que se usan como mascarillas para remover las células muertas.
La exfoliación suave la puedes hacer en casa, con productos naturales como la sal o el azúcar y algún producto nutritivo que incluya vitaminas para la piel como miel, aceites naturales favorables para la piel, como el de jojoba u oliva, o incluso banano o aguacate triturados. Lo saludable es hacer una exfoliación máxima una o dos veces a la semana. El día anterior a la boda podrías hacerte una exfoliación muy suave que asegure que luzcas perfecta con un peinado para cabello corto o con el estilo que hayas elegido.
5. Acude regularmente a una limpieza profesional
Si a la rutina regular de limpieza, le sumas una limpieza profesional cada uno o dos meses, tu piel lucirá espectacular. Lo ideal es que la última limpieza profesional la realices al menos una semana antes del día en que recibirás tu argolla de matrimonio. Estas limpiezas, realizadas por esteticistas profesionales, son ideales para deshacerse de los puntos negros y de los granitos. Con los mismos beneficios de una limpieza facial regular, hidratan profundamente la piel, mejorando su suavidad y elasticidad. La frecuencia dependerá de tu tipo de piel y del diagnóstico de tus necesidades.
6. Trata tu piel con delicadeza
Recuerda tratar con extrema delicadeza la piel de alrededor de tus ojos. Si no la cuidas, se verá agotada con tu peinado semirecogido. Así mismo, para evitar las bacterias, procura no tocar tu piel durante el día. Y para cuidar su equilibrio, asegúrate de usar productos de maquillaje acordes con su tipo. Finalmente, para tratar los puntos negros y los granitos, antes de extraerlos tú misma, lo mejor será que les apliques puntualmente un producto con los ingredientes adecuados, y que reduzcas la irritación con paños de agua fría o té.
En la boda la protagonista eres tú y, además de tu bello e irrepetible ser, tu piel será lo más hermoso que lleves de camino al altar. Con un vestido de novia sencillo o elegante, tu peinado de novia será el marco de un rostro limpio y saludable. ¡Que estos consejos te acompañen en la preparación para lucir perfecta!