Cuida tu anillo de compromiso: 6 situaciones en las que deberías quitártelo
Después de recibir tu anillo de compromiso podría ser difícil desprenderte de él, aunque sea por un momento, pero ten presente que hay actividades que podrían dañarlo de forma irreparable. Para que esto no suceda te dejamos algunos consejos.
Solo pasaron algunas horas desde que tu novio colocó el anillo de compromiso en tu dedo anular izquierdo y bailó contigo por horas al ritmo de los violines. De tanta emoción te sientes incapaz de conciliar el sueño y te imaginas comprando el vestido de novia que tanto te gustó en la boutique que queda de camino a tu trabajo. Esperas que las horas pasen volando en tu reloj despertador para contarles a tus amigas que pronto recibirán tus tarjetas de matrimonio y para mostrarles la evidencia de tan feliz suceso. Despiertas con tu sonrisa más radiante al contemplarlo en tu mano y te bañas para iniciar tu día con el optimismo que te caracteriza, sin darte cuenta que en dos ocasiones acabas de hacer dos actividades que podrían dañar esta joya. Para que esto no vuelva a pasar encontrarás en este artículo las 6 situaciones en las que debes quitarse el anillo de compromiso.
1. A la hora de la limpieza del hogar
Si limpias diariamente tu casa a fondo o eres de las que le dan una pasada rápida durante los días laborables para después dejarla inmaculada durante el fin de semana, sabes que hay productos de limpieza con compuestos más fuertes que otros. Lo puedes sentir cuando lavas tu ropa con el detergente que tienes en casa y tus manos quedan ásperas, o al desinfectar los baños con lejía y percibir su fuerte olor. Así como los productos de limpieza arrasan con los microbios y dejan brillando la cerámica de la cocina, así también son capaces de dañar tu anillo de compromiso de plata o de cualquier otro metal precioso.
2. Durante el ejercicio
Empezar el día trotando en el parque ubicado frente a tu casa, montando bicicleta, nadando o realizando tu rutina de crossfit en el gimnasio, sin duda es muy beneficioso para tu salud física y emocional; pero no necesariamente para tu anillo de compromiso de oro. Porque al ejercitarte tus manos tienden a hincharse y tendrías una molestia innecesaria al intentar quitártelo. El sudor también es responsable del deterioro y la pérdida de brillo de las joyas. Y no te olvides tomar en cuenta que el contacto con algunas máquinas o elementos del gimnasio podrían rayarlo.
3. Cuando te bañes o te laves las manos
El agua potable que sale de la cañería y de la piscina presentan un porcentaje de cloro que sirve para eliminar las bacterias que podrían causarte enfermedades. Antes de bañarte o regalarte una hora de relax en la piscina guarda tu anillo de compromiso de oro blanco en un lugar seguro, y así evitarás que su brillo se pierda. Como el contacto con el agua forma parte de la rutina diaria es inevitable que no se convierta en una de las situaciones en las que debas quitártelo.
4. Antes de aplicarte algunos productos de belleza
Las cremas, lociones y perfumes forman parte de tu ritual de belleza a lo largo del día porque dejan tersa tu piel, te sientes fresca y conservas el agradable aroma que tanto te gusta. Lo que es bueno para ti no necesariamente lo es para tu joya, porque su rápido deterioro no compensará de ninguna manera el precio del anillo de compromiso, especialmente por el significado de amor que encierra.
5. Si vas a la playa o a un día de campo
El amarrarte el cabello durante tu paseo para hacerte un peinado recogido no causará ningún daño a tu anillo, pero tal vez estés decidida a participar de algunas situaciones en las que debes quitarse el anillo de compromiso. Es mejor dejar tu joya en casa guardada en su estuche o en un cofre exclusivo, así evitarás que se extravíe entre la arena o entre las plantas cuando tengas que quitártelo. Además, no olvides que la sal del mar también podría dañarlo.
6. Al dormir
No solo se trata de quitarte tu anillo de compromiso, sino todas las joyas que estés usando antes de descansar para que no pierdas comodidad, no dañes tus joyas y no tengas problemas con tu circulación.
Conocer estas situaciones te permitirán tenerlo en buen estado y realizar el mantenimiento respectivo con menor regularidad. Así que no te preocupes porque con tus cuidados esta joya lucirá siempre como el primer día y será digna de lucirse cerca de tu argolla de matrimonio, tanto durante la ceremonia como en la recepción, cuando saludes a tus invitadas sosteniendo tu bouquet de novia preparada con las magnolias que cultivaste para el gran día.