Desarrollar en pareja un plan de acción para el próximo año y a largo plazo

La convivencia, compromisos, tensiones y negociaciones son elementos esenciales dentro de una relación de pareja en donde cada miembro debe salir de su zona de confort. Al estar dentro de una relación de pareja e iniciar un proyecto de vida en común donde se establecen acuerdos desde los más simples hasta los más complejos, significa encontrar ese equilibrio que permitirá que la relación siga creciendo.

Si somos conscientes y creemos que hemos encontrado a esa persona especial, ello puede empujarnos a construir una relación duradera y estable, quizás de muchos años, y esto nos hace hablar de un proyecto de vida a largo plazo.

Entendamos que un proyecto de vida no necesariamente nace con una pareja, cada uno de nosotros tenemos un proyecto de vida. Los sueños pueden modelarse en pensamientos que se concretarán en nuestra vida en forma de acciones, desde el trabajo deseado, estilo de vida, hijos que desearíamos tener, etc. Si bien no podemos asegurar el futuro a totalidad, trabajaremos dentro de nuestros objetivos realistas y posibles. En otras palabras, cada integrante mantiene un proyecto personal, el cual se adecuará a un proyecto de pareja.

Tengamos en cuenta que, si deseamos tener un proyecto en pareja, existen diferentes detalles que necesitamos considerar, en especial si es a corto plazo. En principio, necesitaremos coordinar nuestras finanzas, ya que en este caso las distribuiremos entre ambos miembros, donde tendremos que coordinar tiempos, cronogramas de trabajos, reuniones, etc., todo ello en un plano medible. Una clara recomendación para fortalecer nuestra relación es hacer actividades que puedan practicarse en pareja como caminatas, montar bicicleta, ir al gimnasio, practicar algún deporte, ello puede lograr enriquecer nuestra relación.

En un inicio la pareja necesita pensar qué metas desea alcanzar, a corto, mediano y largo plazo, así el desarrollar un plan de acción será más fácil. Recordemos que, para alcanzar una meta, esta siempre se ejecuta a través de pequeñas acciones conjuntas que se puedan cumplir. Por ejemplo, irse a vacacionar al Caribe. Aquí a la pareja podría ayudarle plantearse la siguiente pregunta: ¿Cómo podríamos distribuir este objetivo en un tiempo estipulado para que nuestra meta se cumpla? Para esto es necesario definir fecha, lugar, establecer costos en tiempo y dinero, comprar lo que se requiere y planificar el tiempo que estarán fuera respecto a sus actividades, entre otros detalles. Por tanto, un plan sólido que pueda satisfacer a ambos no es algo imposible, al contrario, es base de una relación y no solo es aplicable a una relación de pareja, sino a todo tipo de relaciones, ya sea de trabajo, sociedad, amistad, familia, etc.

Un punto importante es, al planear con tu pareja, no olvidarse de ser honestos en lo que se desea o planifica, estar atentos a las propuestas de cada uno. Quizás no haya ideas comunes que satisfagan a ambos, pero recuerden que la idea es finalmente comparar opiniones. Además, aprender a ceder y negociar es muy relevante, ya que detrás de ello está el hecho de mantener un equilibrio dentro de la relación.

Tu proyecto, el mío, el nuestro…

Tomando en consideración lo anterior, brindaremos algunas pautas que podrían servir como proyecto de vida o plan de acción para un futuro con la persona que consideran la ideal.

1. Contar con un espacio para reflexionar sobre lo que quieren construir

Primero y para la elaboración del proyecto de vida, la pareja debe disponer de un espacio tranquilo donde puedan pensar y reflexionar acerca de lo que desean lograr juntos, teniendo en cuenta las diversas áreas (cognitivo, afectivo, económico, sexual, espiritual, y entre otros que deseen considerar). Para ello, elaborarán una lista, la lista de deseos como pareja; como, por ejemplo:

• Nivel económico o finanzas: comprar una casa, un carro, tener un negocio, etc.

• Hobbies: viajar, salidas juntos, hacer deporte, etc.

• Sexualidad: fortalecer la creatividad sexual, implementar juegos eróticos, etc.

• Comunicación: entablar comunicación asertiva para conectarse y resolver diferencias.

• Afecto: fortalecer el amor de pareja mediante detalles y celebrar las fechas especiales.

2. Que esos deseos o metas a alcanzar estén categorizadas en un tiempo establecido

• A corto plazo: de 1 a 4 meses

• A mediano plazo: de 4 meses a 1 año

• A largo plazo: de 1 a 5 años o más

Es recomendable que a cada tiempo se le otorgue un nombre significativo, el cual servirá de guía. Por ejemplo, a corto tiempo se le denominará “aceptar las diferencias”, a mediano plazo, “crecimiento” y a largo plazo, “compartir el sentido de la vida”.

3. Acciones hacia la consecución de las metas

Para poder llegar a esas metas, se requiere que la pareja realice pequeñas acciones que contribuirán al cumplimiento de sus objetivos a corto, mediano y largo plazo.

4. Y ahora sí, el plan para el siguiente año

Al tener en cuenta estos pasos previos iniciaremos con un ejemplo de plan de acción para el siguiente año y/o vuestro futuro…

A corto plazo: Aceptando nuestras diferencias

• Paseos y salidas en pareja

• Compartir hobbies (hacer ejercicios juntos, leer el mismo libro, etc.)

• Platicar toda una noche

• Afianzar el vínculo sin dejar de lado amistades y familia

• No evitar ni huir de las discusiones de pareja

• Respetar espacios propios de la pareja

• Fomentar el diálogo

• Prestar atención a la comunicación verbal y no verbal, entre otros.

A mediano plazo: Crecimiento

• Seguir manteniendo y reforzar las acciones de la etapa anterior

• No caer en la crítica ni agresión a la otra persona

• Aprender una habilidad juntos (idioma o instrumento)

• Irse de viaje juntos (un fin de semana)

• Una cena elegante en un restaurante que no conozcan

• Tener una mascota

• Un día sin tecnología

• Mantener la pasión y el deseo con mensajes, caricias y demás, fortaleciendo su creatividad sexual

• Sorprenderse con un regalo no esperado, entre otros.

A largo plazo: compartir el sentido de la vida

• Continuar manteniendo y reforzando las mismas acciones de etapas anteriores

• Realizar una aventura juntos (lanzarse de paracaídas, escalar una montaña, volar en parapente, etc.)

• Cocinar juntos y/o cocinarle a la otra persona

• Hacer un viaje largo (fuera del país de origen)

• Pensar en poseer bienes materiales juntos (un carro, una casa, etc.)

• Tener un negocio y expandirlo

• Participar en actividades altruistas o comunitarias

• Hacer una fiesta para celebrar el amor que se tienen o el proyecto que inician juntos, entre otros.

Finalmente, es recomendable que el proyecto de vida de la pareja pase por mínimo 2 evaluaciones durante un tiempo establecido, el cual puede ser un año. Esto para revisar y evaluar si las metas se cumplen de acuerdo al tiempo estimado, para replantearse algunas innecesarias o recurrir a otra actividad. Así mismo, recuerden que todo proyecto debe ser flexible y sujeto a modificaciones, en caso que así se desee y bajo mutuo acuerdo.

Construyan un plan de acción o proyecto de vida con tu pareja juntos. Cabe resaltar que, si en algún momento sienten que no están avanzando, pueden buscar ayuda profesional, ya que este acompañamiento les ayudará de manera positiva a su relación en un futuro.