Consejos para elegir a tus damas de honor

Nos encanta la idea de tener damas. Sea porque las hemos visto cientos de veces en películas o porque alguna vez asistimos a un matrimonio y nos dimos cuenta, que efectivamente, le da ese ‘toque singular’ que exige una fecha tan especial. Además porque tenemos cientos de amigas, ‘potenciales damas’ que estarían felices de ser ‘las escogidas.

Y que genial tenerlas de cómplices ¿no? Hasta aquí, todo bien. Pero pasan los meses y sigues pensando ¿cómo elegirlas? Existe un ABC al que puedes recurrir para dejar de darle vuelta al asunto y comenzar a pensar en otros detalles como escoger el vestido adecuado para las damas de honor...

A. Filtra

Si eres una novia ‘amiguera’ seguro que podría complicarse un poco el asunto de la elección. O por el contrario, no es que tienes muchas amistades, pero sí que hay notable presencia femenina en tu familia y -lo que es peor- a todas las quieres como ‘hermanas de matriz’.

Por lo tanto, ¿cómo escoger entre tantas buenas posibilidades? La respuesta es aplicar lo que hemos denominado ‘primer filtro’. Se trata de tomar una hoja de papel y escribir el nombre de todas tus ‘posibles damas de honor’. Luego, te toca analizar una por una ¿quiénes estarían ‘realmente’ en condiciones de serlo?

• Tímidas

De pronto si la persona que tienes en mente es introvertida o tímida, preferirá pasar desapercibida el día de tu matrimonio. Es decir, no ser tu dama, por más cariño que te tenga.

• Rebeldes

Si en tu lista detectas alguna amiga ‘incomprendida’ que ‘sabes bien’ odiaría vestir del mismo color o en conjunto con otras, táchala de la lista. Obvio, por respeto a su singularidad. Y porque de entrada te diría ¡no!

• Ocupadas

La que con un poco de suerte irá a tu matrimonio. Nos referimos a aquellas amigas que por la naturaleza de sus actividades diarias, sea trabajo, estudios, gimnasio, yoga, meditación, escapes de ‘finde’, amores y otros, no dispone de tiempo ‘extra’ libre, bastante necesario para pruebas de color, vestido, ensayo y otros propios de un compromiso tan importante como ser dama de honor.

• Casos especiales

Si en tu lista hay alguien que por ahora está pasando por un momento complicado en su vida, sea por salud, enfermedad o problemas familiares. Aunque desees que sea tu dama, lo más probable es que te diga no.

• Cuestiones económicas

No debería ser considerado como filtro, pero aceptémoslo, si propones a una amiga que esté pasando por un mal momento económico para que sea tu dama, es casi seguro que te diga no y puede que hasta la indispongas.

B. Ubica tus cómplices

Hasta aquí tu lista se habrá visto reducida como mínimo al 70%. En adelante, te tocará analizar, de ese pequeño grupo, con quiénes verdaderamente te sientes cercana. Quién, de una manera u otra, ha sido cómplice de tu historia de amor ¡cual almohada! y escuchó una y otra vez ‘hasta el hartazgo’ cómo conociste a ese hombre que está a punto de ser tu esposo.

C. Díselo de manera original

Ahora que sabes quiénes son, es momento de darles ‘la gran noticia’. Para ello, te recomendamos buscar la manera más original de decirlo. Un modo que te asegure un ¡Sí! Puedes encontrar inspiración en el artículo 9 Formas creativas para hacer la pregunta a tus damas de honor.

Si sigues estos pasos no tardarás más de una hora y, lo que es mejor, podrías incluso estar comenzando a pensar en otros detalles como la torta de matrimonio, la playlist que desean tener para amonizar cada momento de tu celebración, o el vestido de fiesta que te gustaría que lucieran tus damas de honor. Así que ¡manos a la obra!

También te puede interesar:
Ideas para que tus damas vistan diferentes pero en armonía